viernes, 31 de diciembre de 2010

¡Que entre bien!



Un paseo por la parte antigua, las piedras húmedas, la compañía que quieres...

- ¿Algo más?
- ¿Y para qué?

jueves, 23 de diciembre de 2010

El juego de la taba y la maleta del viajero


Siempre que hace la maleta se acuerda de ese poema. Como la maleta lleva varios días abierta, hace varios días que tiene ese poema en la cabeza. También le ha pedido a los reyes un libro que acaba de editar Calambur. Sabe por los amigos del autor que es un cuaderno de notas, de aforismos, de breves textos sin demasiada conexión, apuntes líricos, filias, fobias... No pierde ocasión, lo dice en cuanto puede, es un autor recomendable.

La maleta del viajero

En esta maleta guardo mis cosas:
el viejo pijama, regalo de mi madre, que nunca me puse,
un trozo de sol en el hombro de ella,
una piedra que sabe del agua más que los peces mismos,
los primeros dientes que mis hijas perdieron,
poemas de amigos que ya no son ni están, pero permanecen,
los ojos, también de ella, cuando anochece,
un telegrama que anunciaba desastres,
el jersey de lana de un amigo muerto,
una música antigua de violines y pianos,
la voz de ella para hablarme de todo esto allá donde vaya
y una cuerda de cáñamo
por si tengo que huir de mí mismo
o ajusticiar a un miserable.

Espero no haberme olvidado de nada:
siempre se olvida algo al cerrar una maleta,
pero nada es importante si se olvida.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Nieve

Foto de leJJD.fr

Afuera nieva, lleva días nevando, la maleta abierta y la nieve en la ventana. El periódico anuncia en titulares que la nieve está de vuelta, pero la nieve no se ha ido. La maleta lleva días abierta y quizá tampoco ellos se vayan. La previsión meteorológica anuncia más nieve para la tarde. Nieve ligera y lluvia verglaçante.

-    ¿Has metido los libros?
-    ¿Y si nos tenemos que quedar?

lunes, 20 de diciembre de 2010

Ligablo


Tengo entendido que Ligablo en el lenguaje del Congo es un comercio pequeño, uno de esos puestos callejeros que tiene de todo, como aquellas tiendas de la infancia a las que tu madre te mandaba cada día, porque cada día se le había olvidado algo, y tú ibas a casa de tía Eulogia, o luego de Sergio, y de allí, de aquel espacio mínimo, sin paredes, sólo estantes repletísimos a punto de venirse abajo, tú siempre volvías con el mandado hecho. Pues sí, como aquellos mostradores de madera de la infancia, así es esta exposición que se puede visitar hasta el quince de enero en la Biblioteca Real de Bélgica en Bruselas: cajas de leche en polvo Nido, pastillas de jabón (las lagarto), tintes para el pelo, cajetillas de tabaco, carátulas de discos, sillas de plástico, etc, pequeños objetos insólitos y emblemáticos; pero también fotos, esculturas, videoinstalaciones. Una exposición muy curiosa.

El comisario de esta inmersión en el imaginario congolés es el profesor Toma Muteba Luntumbue; y de recrear este universo popular se encargaron, entre otros, los artistas Sarah Vanagt, Colin Delfosse, Louis Kakudji, Aimé Mpane, etc.

La vitalidad cotidiana de un sitio cálido en los estantes de otro muy frío, y la verdad, acaba por no ser tan difícil lo de imaginarse a uno deambulando por las calles de Kinshasa.


viernes, 17 de diciembre de 2010

Revistas (1)


Eulalie es una revista de actualidad sobre libros y letras en la región de Nord-Pas-de-Calais y en general en el norte de Francia. El nombre de la revista es un homenaje al manuscrito Cantilène de Sainte Eulalie, (Cantilena de Santa Eulalia), un texto redactado en torno al año 880 y que hoy es considerado como el primer texto literario en lengua romance, antecedente del francés moderno. Hasta ahora han salido cinco números, y todos se caracterizan por estar muy bien ilustrados con muchas fotografías y secciones variadas: vida literaria, novedades, librerías, edición, bibliotecas, etc. Una de estas revistas que están bien para mantenerse al día. Si alguien tiene curiosidad, los números anteriores pueden verse aquí.

jueves, 16 de diciembre de 2010

Todo lo bueno se acaba


Esta mañana, en el café, el mismo ventanal y tú no estabas. Por el camino el frío se fue mofando de mi gorro de lana, pero no pude decírtelo. La biblioteca es un estadio vacío y tú tampoco estás (ni siquiera estaban las monedas olvidadas en la máquina). Toñi, ¿Por qué coño te fuiste?

martes, 14 de diciembre de 2010

5ª Feria del Libro de Lille


La ciudad de Lille, dicen, es la capital del norte. A uno, siempre le había parecido una ciudad sin interés, una ciudad industrial, húmeda y fría en el norte de Francia; y, efectivamente, es una ciudad industrial, húmeda y fría en el norte de Francia, pero es también una ciudad hermosa y con toda la apariencia de ser muy interesante. Allí, en la Maison Folie, una antigua fábrica reconvertida en espacio cultural y por eso en casa loca, se celebró el pasado fin de semana la fiesta del libro:

Presentaciones, editoriales, café literario (animado por el crítico y periodista cultural Hubert Artus), charlas (interesante la del poeta inglés Ian Monk, ganas de leerlo), y también, claro, la zona de ventas: tres pisos, y literatura en todos los formatos, en bombones, en cajitas de cerillas, en cuenquitos para el té, literatura manuscrita, mecanografiada, ilustrada, profusamente dedicada. Fue una experiencia, más autores que visitantes, mirabas un libro y se te lanzaba el literato a convencerte, al final, casi daba miedo levantar la vista, no digo ya del estante, del suelo incluso.

Y como uno no está acostumbrado a que quienes escriben libros le intimiden de esa manera, salió confuso. Luego oyó decir aquello de que son cuestiones culturales, pero no acabó de convencerle, pensó, ¿será esto lo que nos viene?, y se asustó; luego pensó también en alguno de los huidizos, por ejemplo, en nuestro Álvaro Valverde, y sonrió (con malicia).

jueves, 9 de diciembre de 2010

Sergio Adillo en Nueva York


Sergio Adillo es un muchacho con talento, quien le conoce, lo sabe. Hoy lo dice Lama y se viene diciendo mucho últimamente: Artez, 20 minutos, El Mundo, El día de Valladolid… (no lo he visto aún ni en el Hoy ni en el Extremadura, pero seguro que también ha salido, o que saldrá). El caso es que este muchacho inquieto e ingenioso, del que los atentos van a oír hablar mucho (y los menos atentos también) a principios de este último verano se fue a Nueva York. Allí se encontró con la vallisoletana Lucía Rodríguez y los dos, con otros muchos (participan más de 40 personas de más de diez nacionalidades diferentes), montaron The Cross Border Project. Se trata de un proyecto multicultural con el que estos días están representando en el Teatro Thalia de Nueva York la obra Fuenteovejuna de Lope de Vega.

La particularidad es que la acción que Lope de Vega sitúo en la Andalucía de principios del siglo XVI no trascurre ni allí ni entonces, sino ahora y en la mexicana Ciudad Juárez. O sea, que la violencia, las injusticias y los oprimidos de entonces, son ahora  los cárteles de la droga, los feminicidios, la actitud del gobierno, etc.

Sergio Adillo ha sido el encargado de hacer la adaptación (sabe lo que se hace, su Tesis Doctoral se centra en las representaciones que la Compañía de Teatro Clásico ha hecho de La vida es sueño) y cuenta que  concibieron el montaje (construcción de los personajes, signos escénicos, etc) a partir de la técnica de Teatro del Oprimido de Augusto Boal, por eso hay una contraposición constante entre el oprimido y el opresor. Y visto desde aquí, es también ahí donde está la valentía. Lope escribió Fuenteovejuna en 1610, hoy, justo cuatrocientos años después, las formas de tiranía cambiaron de escenario pero permanecen vigentes, se murió aquel Fernán Gómez pero le nacieron cientos, lo fundamental, lo terrible, el dolor y la injusticia, siguen campando. Por eso cada día hay miles de razones para gritarlo y denunciarlo, por eso lo que están haciendo en Nueva York Sergio y sus colegas es mucho más que la representación de un clásico, es también y sobre todo, un acto de valentía y de coraje, de compromiso y de denuncia.

Y a todo esto, ¿quién hace del Comendador? Pues, Sergio Adillo.

martes, 7 de diciembre de 2010

Da vida bela


Acaba de aparecer en Portugal, editado pela Fundação Odemira Edições, la colectánea de cuentos “Da Vida Bela”. La publicación forma parte de la colección Língua Escrita, de la que ya se publicó el año pasado el primer volumen titulado “Da Natureza”. Como en el número anterior, la coordinación editorial es de Sara Monteiro y las ilustraciones de Margarida Perente.

En este volumen de “Da Vida Bela”, con prefacio de Fernando Silva y traducciones de Sara Monteiro y Filomena Alves, se presentan textos de J.M. Restivo Braz, Rui Costa, Luís Ene, António Gregório, Ana Gusmão, Paulo Kellerman, Sara Monteiro, Laura Nogueira, Risoleta C Pinto Pedro, Ana Ramalhete, Driss Buisssef Rekab, Pedro Sena-Lino y António Trinidad.

Hasta ahora, muchos textos sugerentes, algunos nombres para retenerlos y una gran satisfacción. Gracias, Sara.
 

viernes, 3 de diciembre de 2010

En el Museo Judío de Bélgica


Se ha escrito que la mujer de esta fotografía, con su rostro prematuramente envejecido, expresa por sí sola la esperanza de un pueblo que esperaba en las reformas de los días venideros sus horas felices. Tal vez. La foto la hizo Chim en un mitin en Extremadura en 1936. De Chim se han dicho muchas cosas buenas, por ejemplo, Robert Capa dijo que el verdadero fotógrafo era él; y Henri Cartier-Bresson que sin él, Magnum no hubiera podido existir.

El fotógrafo David Seymour (Chim) artista, humanista e intelectual nació en Varsovia el 20 de noviembre de 1911 y murió el 10 noviembre de 1956 cuando se disponía a fotografiar un intercambio de prisioneros tras el cese al fuego en la guerra del Sinaí. Se ha dicho que lo mataron las balas de un soldado de Nasser.

En el Museo Judío de Bélgica se puede ver actualmente una exposición retrospectiva de su obra. Muchas fotografías son del tiempo de nuestra Guerra Civil, dicen que Chim fue de los primeros fotógrafos que se desplazó a España para denunciar lo que pasaba, que quiso estar en el frente y en la retaguardia. En la exposición hay varios retratos de La Pasionaria, de Miguel Hernández arengando, de muchachos desquiciados en el frente y de niños que en la guerra jugaban a la guerra.

Además hay también muchas otras víctimas de otras guerras, de Polonia, de Hungría, de Italia, campos de refugiados, gente desplazada, hospitales… Terribles las fotografías de los orfelinatos. Y también glamour, Solían Loren bellísima sentada en la terraza de su apartamento, Françoise Sagan metida en otro mundo, Audrey Hepburn fumando, María Calas, Ingrid Bergman, Kirk Douglas, y la vida cotidiana en Grecia, y la esperanza de los emigrantes judíos llegando a la nueva patria… La exposición se apoya en textos cortos e imprescindibles; y se completa con documentos muy apropiados y explicativos: pasaportes, salvoconductos, periódicos de la época, su máquina Leica, etc. 

En fin, compasión, ternura, belleza y mucho dolor, sobre todo, mucho dolor. Una exposición que revuelve las entrañas y merece la pena.

jueves, 2 de diciembre de 2010

Otra vez El Roto

El Roto El País
Qué tino tiene este tío.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Los fantasmas del sombrerero

Se ha dicho que el término superventas se inventó para él o que tiene el honor de ser el escritor más publicado del siglo XX, será verdad, y cuando se lee a Simenon, tanto para bien como para mal, se entiende. El planteamiento de Los fantasmas del sombrerero es este: Léon Labbé, un respetable comerciante de La Rochelle, dueño de una sombrerería, acude cada noche al Café des Colonnes, donde juega su habitual partida de bridge con sus amigos de siempre. Desde hace unas semanas, varias mujeres han aparecido asesinadas en la ciudad, y un periodista, de nombre Jeantet, mantiene con el anónimo asesino un macabro diálogo a través de las páginas de un diario local. Entretanto, un sastre empobrecido, procedente del cercano Oriente y apellidado Kachudas, descubre casualmente un indicio sospechoso en la ropa de Labbé. Aterrorizado, decide guardar silencio a pesar de la tentadora recompensa que podría obtener si lo delatara…

Luego ya, una ciudad asfixiante y húmeda, muchas vidas anodinas, mediocridad, resentimiento, frustración, la insatisfacción sexual, el qué dirán, en fin, otra novela que se lee bien y que quiere aproximarse a lo que debe de ser la psicología de un asesino en serie.

martes, 30 de noviembre de 2010

Noches de letras y tapas en Casa Miguel

 
Casa Miguel, Bruselas
En Bruselas también existe una tertulia literaria en castellano. Es cada martes último de mes en Casa Miguel, un restaurante acogedor y una joyita escondida de cocina española. La tertulia es iniciativa del cantante lírico y poeta José Miguel Arranz y del chileno, poeta hondo y siempre exiliado, José Ponce Vicencio. Suelen ser habituales, entre otros, Gonzalo Suárez, Solimar Ojeda, Marisol Chao o Ignacio Clavero. Unos y otros irán apareciendo.

domingo, 28 de noviembre de 2010

La maison du peuple.

 
Mañana de domingo, con sol, despedida y restos de nieve en los rincones. Luego, paseo por el mercadillo del Parvis Saint Gilles, quesos y dátiles con un café bien leído en La maison du peuple. Es un café que remodelaron hace un par de años y que ocupa la planta baja de la que, inaugurada en 1907, fue la Casa del Pueblo de un barrio de Bruselas lleno, aún más entonces, de españoles y portugueses.  Hoy es un café amplio, de ambiente caluroso y con mucha gente que lee y mira el frío al otro lado de los cristales. Da gusto.

viernes, 26 de noviembre de 2010

Relimpios

 
Recoge hoy El País que la diseñadora británica Vivienne Westwood ha dicho que no es ecológico lavar tanto la ropa, que si uno suda es mejor ponerse un poco de talco en las axilas, y que hay que comprarse mucha menos ropa barata y alguna un poco más cara; seguramente ella lo dice porque sus estrafalarios diseños deben de ser carísimos; pero una cosa es verdad, a cuento de qué ese vicio de mudarse de ropa cada mañana, qué desperdicio, esas lavadoras todo el día trabajando

(y ahora, a coro, ¡qué guarro!)

Pues no, pero… y se acuerda de aquel chiste de la infancia, oído entonces en su contexto, tan rural:

El hombre que se dispone a ordeñar a la vaca a la sombra del olivo y al poco de empezar la tarea, va la vaca y zas, una patada y la caldereta por el suelo; contrariado, coge una cuerda, le traba las patas y reemprende la tarea; pero al momento, la vaca, ahora con el rabo, otra vez zas y la leche nuevamente por el suelo. Entonces, indignado, el hombre decide atar el rabo de la vaca a una rama del olivo, y cuando está ya en medio del proceso se da cuenta de que no tiene más cuerdas en el bolsillo, pero por no empezar otra vez, aquello de sabe Dios dónde habrá ahora una cuerda, etc., decide quitarse el cinturón y utilizarlo como atadura; justo cuando está en plena función, los brazos con el rabo en alto, la rama del olivo, los pantalones bajados, entra un vecino,

—    Pero, Antonio, muchacho ¿qué haces?
—    Eh, huy, hum… Mira, tirándome a la vaca, porque si te digo otra cosa, no me vas a creer.

Pues eso, que a qué tanta limpieza de lo limpio, que menudo derroche, que cuánto desperdicio.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Mi mejor enemigo


Hay guerras con muertos que nunca han existido, la de 1957 en Sidi Ifni, por ejemplo. Son guerras borradas, intencionadamente suprimidas, menospreciadas. Otra de estas fue el llamado Conflicto del Beagle que estuvo a punto de provocar en diciembre de 1978 una carnicería entre argentinos y chilenos por culpa de unos cuantos perejiles sin importancia, otra vez lo del valor estratégico.

En 2005, el director chileno Alex Bowen filmó Mi mejor enemigo, una crítica de aquel enfrentamiento tan ridículo como innecesario, de aquella casiguerra que no llegó a estallar del todo y que dejó en medio de la Patagonia a unos cuantos desgraciados olvidados, muertos de frío y vestidos de soldados.

Es verdad que no es la película perfecta, que es otra película más sobre lo absurdo, lo ridículo, lo vergonzoso y lo patético de la guerra, pero se deja ver, te mantiene atento y, en cualquier caso, se agradece su humor, el rescate del bochorno y su intención.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Positos de vino


Es fácil y confesable la admiración por Héctor Abad Faciolince. Por la destreza de su prosa, por su maestría en el uso del idioma, por su dominio de la estructura narrativa, por esa facilidad que tiene para hacer literatura de su biografía, etc. Es verdad también que El amanecer de un marido no es El olvido que seremos, pero sigue siendo un libro bueno. Son dieciséis cuentos que giran casi todos en torno al matrimonio, que hablan del aburrimiento, la fantasía, el desprecio, la sospecha, el rencor, la inseguridad, el cariño, etc., que genera la monogamia, del cansancio que sigue al entusiasmo del enamoramiento, etc. Resultan particularmente atractivos los dos cuentos con los que arranca y termina el libro, y que no van precisamente de lo que van los otros, el primero, “Álbum”, lírico y triste, trata de un olvido y la muerte de una madre; el último, “Mientras tanto”, del dolor y el miedo de un escritor que imagina su propia muerte en un país desangrado por la impunidad y la violencia. En cualquier, caso un buen libro de cuentos.

En cierta ocasión le afearon a Héctor Abad Faciolince que se quejara de tener tan mala memoria, siendo, como era, tan generoso en las citas literarias; y entonces él se defendió, dijo, es que yo he leído mucho, llevo desde los quince años leyendo y leyendo y leyendo sin parar, y para todo lo que yo he leído, lo que recuerdo es nada, lo que he olvidado son cúmulos y cúmulos de libros, de ideas, de buenas películas, de buenas novelas. Dijo más, es como si un vaso de vino se hubiera evaporado y lo que queda es un polvito en el fondo, eso es lo que yo recuerdo. Pues eso, que para quien no ha leído tanto y lo que recuerda es ya únicamente polvo erosionado, sería un consuelo que al menos alguno de estos cuentos de El amanecer de un marido terminara siendo positos de vino.

viernes, 19 de noviembre de 2010

Rosana Hilara en el Retiro

 Silencios Óleo/lienzo, 81x100

Esta tarde, a las cuatro, en la sala de exposiciones del distrito de Retiro (Avenida Ciudad de Barcelona, 162) se inaugura una exposición de la pintora Rosana Hilara.

Sobre la obra expuesta, la también pintora Belén Elorrieta ha escrito: “Me gusta ver como Rosana afronta la realidad de un cuadro. Parte de un fondo abstracto y comienza el dibujo de un boceto sin demasiado detalle. Perfila y ordena las formas con una línea, y luego, a golpes de pincel-martillo, va construyendo el espacio…”. “Su atrevimiento y su libertad en el trazo es una proyección de su personalidad”. “Esta pintora posee un impulso arrollador y vigoroso, (…) se compromete en todo lo que considera digno. Sabe de valentías y compromisos”. “Sus figuras y sus ciudades son nuevas realidades, son presencias imaginadas, que les hace aparecer ante nuestra mirada como seres verdaderos. Y esto sólo es así cuando una obra muestra la verdad”.

La exposición estará abierta hasta el trece de diciembre, de lunes a viernes y desde las nueve de la mañana hasta las cinco de la tarde.

jueves, 18 de noviembre de 2010

Ensor démasqué

Chinoiseries, éventails et étoffes (1880), detalle, Le soir.
James Ensor nació en Ostende hace ciento cincuenta años. Para conmemorarlo y rentabilizarlo el banco ING, el Museo Real de Bellas Artes de Amberes (KMSKA) y el Palacio de Bellas Artes de Bruselas (Bozar) han organizado la exposición Ensor desenmascarado. Una retrospectiva de óleos y grabados de quien es considerado como uno de los pintores más destacados del expresionismo y una figura fundamental en la historia de la pintura belga. En la muestra hay bastante obra, hay interiores y paisajes de su primera etapa, cuando pintaba en consonancia con el reconocimiento establecido de su tiempo, y están, claro, los payasos, los esqueletos, los colores chillones, las pinceladas vibrantes, pastosas, etc., que le convirtieron en referencia del arte contemporáneo. Son esas máscaras las que explican que este año, con la excusa del aniversario, también se hayan organizado exposiciones de Ensor en Madrid, París, Gante, Ostende, Tourcoing, etc. Es normal, lo que pasa es que la exposición de Bruselas se anunció con tanto bombo, tanto boato, acontecimientos del año en Bélgica, etc, que lo que hubiera sido una grata sorpresa en un museo provincial acabó siendo sólo otra exposición más (con regusto a decepción y escaparate).

martes, 16 de noviembre de 2010

Lo peor de todo


Hay novelas que se olvidan con facilidad y lectores de novelas que olvidan fácilmente. En cualquier caso, sabía que Lo peor de todo era una novela pendiente. Casi todavía eran los tiempos de la Avenida de los Quijotes y aquello fue un éxito de público y de crítica, se decía que se estaba traduciendo por toda Europa, se hablaba de Lo peor de todo y de la generación X, se daban nombres nuevos, Mañas, Gopegui, Magrinya, se decía, rebeldía y conformismo, la generación de la apatía, etc.

Luego, bastantes años después, vio el título reeditado por Alfaguara y se acordó de que Lo peor de todo seguía pendiente.

Son poco más de cien páginas narradas en primera persona, cuadros fragmentarios, frases cortas, imágenes que entran y salen de una misma historia, una historia triste de infancia y desencanto, de amor abandonado; un lirismo sucio, a veces manchado de sangre, a veces sucio y triste, a veces, sólo sencillo, T. se ponía un vestido corto, de niña fea, y estaba preciosa.

Entonces no quiso leerla y ahora no se arrepiente, de haberla leído, claro. En cualquier caso, mucho mejor de lo que muchos dijeron.

domingo, 14 de noviembre de 2010

Ficción


Le gusta mucho el cine de Cesc Gay. Dijo, Sábado, llueve, qué mejor. Luego lo confirmó. Ficción es una película sencilla, serena y honda, que escarba, una película en la que pasa lo que alguna vez pasa en la vida, que el amor llega y se va y te deja desconsolado y tiritando, dubitativo, fiel y contrariado. Una película en la que hablan los silencios y las miradas y en la que, raro, la fidelidad, pese a la infidelidad, sale ganando. Y debe ser que el amor, a veces, al menos algunas veces, también es eso, dejarlo ir, seguirle el rastro en el recuerdo, adornarlo, revivirlo como ascua entre las manos en invierno. Luego está el magnetismo de Eduard Fernández, la frescura de Montse Germán, el paisaje de los Pirineos, etc, y, sobre todo, el regusto que dejan las historias bien contadas.

sábado, 13 de noviembre de 2010

Frágil


Mañana fría que desuela, parada de autobús sin marquesina, entre las manos, Frágil, de Javier Rodríguez Marcos,

Odisea

Este es el primer día
del invierno. La estación amenaza.
Han puesto cerco a la ciudad los truenos,
se oscurecen las cosas y así todo
parece demasiado.

El aliento cortado del frío de noviembre
es un animal ciego
que llama a las ventanas.

La música del mundo es esta noche
el ruido del camión de la basura,
su canto de sirena
callada y parpadeante.

Hoy se juega la vida. Tal vez lo extraordinario
no esté en lo extraordinario,
sino en sobrevivir
al tedio duro y seco de días como éste.

Amenaza tormenta.
Una paz momentánea nos remonta la espalda
si pensamos de pronto, tumbados en el suelo,
atados sin remedio al mástil de la nada,
que no estaría mal
que nos partiese un rayo.

Levantó los ojos, dijo, Parece rigurosamente tal cual.

viernes, 12 de noviembre de 2010

Perito en lunas


Este miércoles se inauguró en el Instituto Cervantes de Bruselas la exposición “Perito en lunas”. En total, en las tres salas del edificio de la Avenida de Tervurenlaan, están colgados 42 grabados de Ángel López Monsalvo inspirados en poemas del primer libro de Miguel Hernández. Las obras, que este año se han exhibido ya varias veces en España y que antes estuvieron en la Sede de la Fundación Comunidad Valenciana-Región Europea de Bruselas, se expusieron por primera vez en la sala Puente Cultural de Madrid en marzo de 1977, cuando los tiempos eran otros.

Hay un constante estío de ceniza
para curtir la luna de la era,
más que aquélla caliente que aquél iza,
y más, si menos, oro, duradera.

Una imposible y otra alcanzadiza,
¿hacia cuál de las dos haré carrera?
Oh tú, perito en lunas, que yo sepa
qué es de mejor sabor y cepa.

Fue entrañable escuchar en la voz del también poeta José Miguel Arranz, con la música de Alberto Cortez, los versos de las nanas de la cebolla.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Caballero y Vallejo en Passa porta

En una noche fría en la Librería Passa porta fue muy reconfortante escuchar a los colombianos Antonio Caballero y Fernando Vallejo en conversación con Thierry Altman. Desde 1987 el  Ministerio de Cultura francés, a través del Centro Nacional del Libro, organiza lo que se llama el festival Les Belles Etrangères que tiene la finalidad favorecer la difusión en Francia y en Bélgica de la literatura que se hace en otros sitios. Este año tocaba Colombia y a Bruselas le correspondió Caballero y Vallejo (Faciolince, por ejemplo, estaba en París).

Vinieron para hablar de la vitalidad creativa de la literatura colombiana pero de eso fue de lo que menos hablaron. Lo hicieron sobre todo de ellos y de la nada, de la violencia que es y no es, que siempre está presente pero que no siempre amenaza, de la puta de Babilonia y la perversidad de todas las religiones, etc. Provocación e inteligencia, qué facilidad y qué descaro. Daba gusto y muchas ganas de seguir leyendo. Y durante toda la conversación, Antonio Caballero parecía Caballero Bonald (el mismo gesto que amenaza enfado, algo más dulce la sonrisa) y Vallejo un niño bueno metido a malo. Qué pena que algunas cosas se acaben tan pronto (teniendo en cuenta también el frío que hace afuera).

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Giulia Telaro

Lee con tristeza lo que se cuenta de El Aaiún y se acuerda de Giulia. Ella estuvo allí, Giulia Telaro, joven, inteligente, generosa, sobradamente preparada, estuvo por allí meses seguidos y se cansó. Se agotó de curar con palabras la tristeza y la sinrazón. Les veía irse, salir de la jaima, y se quedaba desahuciada. Ella lo sabía, únicamente podía ofrecer gestos, paciencia, una comprensión infinita y las manos atadas, alambrabas, emparedadas… Pero las heridas abiertas no se curan con palabras. Tú no te impliques, lo contó un día en Cáceres con tristeza, con dolor, y él vio su imagen, la noche haciéndose noche tras noche, el silencio afuera, su rostro mirando un techo indemne, vacío, un techo empapelado de resoluciones y lo entendió.

Giulia Telaro no es mujer para no implicarse, no aguantó, un día ganó coraje, renunció a una prometedora carrera en el maratón de la ayuda humanitaria y se volvió.

Ya de vuelta, aquel mediodía de amistad, de navidades y cervezas, él le oía hablar, tan comedida, tan certera, tan prudente, y lo pensó, Qué coraje. Hay que ser valiente para no querer seguir jugando al juego de los buenos, malos y malísimos, para no querer seguir viviendo del cuento de las buenas intenciones y la minurso, el de los cielos rasos y los millones estrellados, contra la arena, contra las esperanzas rotas, desasistidas, alentadas, reprimidas. 

Hoy aquí, tan cómodamente lejos, él lo piensa, Qué vergüenza, todos preocupados y ellos muriéndose; y se acuerda con cariño de Giulia Telaro y le viene a la memoria el arranque de un poema de Adriana Merino, otra desahuciada, aquel que dice,

Soy como el viento;
que porfiado se debate
en las MURALLAS de
la ciudad maldita.

Se debate, tenaz, queriendo
derribar la puerta blasonada.
La de recios pilares inviolables.
Guardiana del puente colgante
proyectado en el vacío.
Limitando, fustigado la esperanza
del arribo a la morada el reposo
prometido, anunciado en los inicios
de los tiempos…

Ay de aquél, que desató
del mar la furia,
desafío la aridez del DESIERTO
y fue testigo del naufragio
de las naves…

martes, 9 de noviembre de 2010

Itinerancia y novelones


Se despertó de veinte días de itinerancia y un novelón.

Dijo,

- Hay novelas enormes e imprescindibles, pero ésta es sólo buena.
- ¿Sólo?
- Bueno, si apuras, sólo casi buena.
- Pero a ti te gusta como pocos.
- Sí, crea ambientes como pocos, pero ésta le salió innecesariamente extensa y previsible.

Luego se calló, y luego dijo,

- Alguien tendría que decírselo.

viernes, 29 de octubre de 2010

La Gulbenkian


Es un rincón pacífico. Afuera llueve, es un ventanal enorme y afuera llueve.  Ha llovido mucho en estos años, llueve mucho en esta mañana de otoño y esa biblioteca sigue siendo un lugar apacible y plácido. Más de 190.000 volúmenes de monografías, miles de catálogos, decenas de publicaciones periódicas y un ventanal enorme, un jardín japonés y agua y verde.  

Todo es como entonces, incluso la tristeza, sólo el cuerpo ha cambiado.

Corpo que te seja leve o peso das estrelas
e de tua boca irrompa a inocência nua
dum lírio cujo caule se estende e
ramifica para lá dos alicerces da casa

abre a janela debruça-te
deixa que o mar inunde os órgãos do corpo
espalha lumen a ponta dos dedos e toca
ao de leve aquilo que debe ser preservado

mas olho para as mãos e leio
o que o vento norte escreveu sobre os dunas

levanto-me do fundo de ti humilde lama
e num soluço da respiração sei que estou vivo
sou o centro sísmico do mundo

Poema de Al Berto


(Cuerpo
que te sea leve el peso de las estrellas
y de tu boca irrumpa la desnuda inocencia
de un lirio cuyo tallo se extiende y
ramifica más allá de los cimientos de la casa

abre la ventana y asómate
deja que el mar inunde los órganos del cuerpo
esparce lumbre en la punta de los dedos y toca
apenas aquello que debe ser preservado

pero miro las manos y leo
lo que el viento norte escribió sobre las dunas

me levanto del fondo de ti humilde barro
y en un sollozo de la respiración sé que estoy vivo
soy el centro sísmico del mundo.
Traducción de Eduardo Langanhe)

Foto de O Jumento

miércoles, 27 de octubre de 2010

Rincones revisitados

Como los pájaros que migran, siempre vuelve. Pisa Lisboa y le llevan los pasos. Son rincones. De los que más, el poema del Jardín Amalia Rodrigues. Tres vértices de placidez y de descanso. Uno, el marco, un anfiteatro verde y un espejo de agua en la cima del Parque Eduardo VII diseñado por el arquitecto paisajista Gonçalo Ribeiro Telles. Dos, O Segredo, la escultura, la complicidad de bronce que Lagoa Henriques se hizo para sí mismo en 1961, dijo, para reproducir un deslumbramiento. Tres, el fragmento,

Deixa-me ouvir o que não ouço. . .
Não é a brisa ou o arvoredo;
É outra coisa intercalada. . .

É qualquer coisa que não posso
Ouvir senão em segredo,
E que talvez não seja nada.


(Déjame oír lo que no oigo...
No es la brisa o la arboleda;
es otra cosa intercalada...

Es cualquier cosa que no puedo
oír sino en secreto,
y que tal vez no sea nada.)

Está fechado el doce de agosto de 1930. El poema completo en Fernando Pessoa, Poesias Inéditas (1919-1930) (Nota previa de Vitorino Nemésio) Lisboa, Ed. Ática (imp. 1963). p.145.

Luego allí, un cafetito en la terraza, a la vera del agua. Qué sosiego.

lunes, 25 de octubre de 2010

Viñals en el Círculo


En una noche espléndida de jueves, en la Sala Nueva del Círculo de Bellas Artes de Madrid, Luis Sáez, director de la Editora Regional de Extremadura, y los antólogos Benito del Pliego y Andrés Fisher presentaron Caballo en el umbral - Antología poética (1958-2006) de José Viñals.  La sala estaba llena y resultó grato oír las palabras de Viñals en la voces de Carmen Camacho, Esther Ramón, Ernesto García, Jordi Doce, Juan Soros, María Salgado y Elías Moro.

Desde entonces acompañan los poemas, y se están haciendo resistentes algunos proverbios del impostor, como ese que dice,

El amor que no se desnuda es tan soez como la muerte que no se viste

O ese otro,

Inútil la limosna que no se da por odio a la limosna.

miércoles, 20 de octubre de 2010

Un poema sin poeta (conocido)

 ¡Qué cerca del parapeto
se quejó toda la noche!
Pero era noche sin luna
y no bastaban las voces…

Cuando despuntaba el día
le vimos en un ribazo
¡qué quieto se sonreía!

Hay poemas que se resisten al olvido y nombres de poetas que luego nunca se citan, los de arriba, por ejemplo. El otro día volvieron a aparecer, los dos, por casualidad, el autor y el poema, en Poesía de la Guerra Civil española. Antología (1936-1939), edición de Jorge Urrutia. En la extensa introducción titulada "Poética para un desastre", el que fuera Director Académico del Instituto Cervantes no dice nada de ninguno, ni del poema ni del autor, pero ya es sabido, el tal José R. Camacho, en tanto que poeta, no existió nunca, ni nunca pudo ser el autor del libro Los versos del combatiente, editado en Bilbao en 1938 y después muy referenciado.

Lo contó en su momento otro poeta, Miguel d’Ors,  en el artículo "Un poema escondido de Manuel Machado y otras perplejidades bibliográficas”, recopilado luego en Estudios sobre Manuel Machado (Renacimiento, 2000), quienes se enmascaran tras el nombre del Sargento de Morteros José R. Camacho fueron los principales líricos del bando de Franco, esto es, Manuel Machado, José María Pemán, Agustín de Foxá, Dionisio Ridruejo, Luis-Felipe Vivanco, Leopoldo Panero y Luis Rosales. Y dice más, dice, el segundo apellido de Luis Rosales es Camacho, por lo que la R. del tal sargento puede interpretarse como la inicial de Rosales, y además Luis Rosales tuvo un hermano que se llamaba exactamente José Rosales Camacho, muy conocido en Granada como Pepiniqui y que llegó a ser sargento de morteros dentro de una bandera de la Falange. De ahí el nombre.
Lo que ya no contó el nieto de Eugenio d’Ors es por qué Pepiniqui se lo prestó. ¿O fue una broma? Una broma de poetas, de falangistas, algunos, buenos poetas. 

martes, 19 de octubre de 2010

Philippe Jaccottet

Foto Jean Marc de Samie

El poeta suizo de expresión francesa Philippe Jaccottet es sin duda una de las voces más respetadas y valoradas de la poesía en lengua francesa actual. Traductor al francés de poetas alemanes o italianos como Hölderlin, Rilke, Novalis, Ungaretti, Musil, etc, se dice que su obra bebe en las fuentes de la más amplia cultura europea. La crítica ha valorado de él su honestidad con el lenguaje, la paciencia de su mirada, su maestría para sugerir sin acabar de decir, etc.; pero también, como escribió Henri Lemaître, el haber sabido renovar la poesía francesa sin caer en la provocación, en la búsqueda hermética o en otras moderneces de complacencia intelectual. Para buena parte de esa crítica, por ejemplo para Michel Jarrety, Jaccottet alcanzó el equilibrio justo y la plena madurez con la publicación, en 1967, de Airs.

Es precisamente con este título con el que arranca la colección "Voces sin tiempo" que edita la Fundación Ortega Muñoz bajo la dirección (y es garantía) de Álvaro Valverde y Jordi Doce.

El libro se estructura en seis secciones que, de alguna manera, siguen el ritmo de las estaciones del año. En él, y traducidas por Rafael-José Díaz, leeremos perlitas como ésta

Je ne veux plus me poser
voler à la vitesse du temps
croire ainsi un instant
mon attente immobile

lunes, 18 de octubre de 2010

Los desafíos de Mena


Filomena Alves es una mujer generosa e intuitiva y tiene un extraordinario sentido del humor. También escribe deliciosamente aunque se ejercite a diario en el empeño de negarlo. Le encanta divertirse y que jueguen con ella. Lo que más le gusta es jugar a los desafíos, ella lo llama As minhas maluquices!!!!, pero, para el resto, son Los desafíos de Mena. Éste es el último, Lá vai mais um "desafiozinho: Vamos lá encontrar imagens, se calhar vossas, para este cartaz que apareceu no blog LER. Ou também podem partir dele para outra ideia. Fica ao vosso criterio. Agora que a Direcção Geral de Livros e Bibliotecas vai ser extinta (mas integrada), compete a todos e cada um de nós promover a leitura, seja onde for e de que maneira for, nem que seja a fazer o pino... 

Se juega

viernes, 15 de octubre de 2010

L.

Julio Romero de Torres Naranjas y limones

Le escribió:

Querido L. 
Velo la tristeza de aquel correo y tu silencio me inquieta. Mira a ver.

"Naranja dulce, limón partido,
¡ay, que a eso sabe lo que te pido!

Dulce naranja y agrio limón:
las dos mitades del corazón.

Amor en una y en la otra olvido,
¡ay, que a eso sabe lo que te pido!

El poemita es de Bernardo Ortiz de Montellano, de su libro El trompo de siete colores (México 1925), casi todos los poemas de aquel libro son variaciones sobre el folclore popular, muchos de ellos, como este, basados en canciones populares infantiles, eran los tiempos del México posrevolucionario, acuérdate. Con el poema, va un abrazo.

Salud.

jueves, 14 de octubre de 2010

Educación (I)


Hoy en Le Monde, el escritor y cineasta Philippe Claudel: “Se debería venerar a aquellos que transmiten el saber. Es lo más importante en la historia del mundo: No hay humanidad sin esta transmisión. Cuando una sociedad no es capaz de reconocer el rol civilizador de la educación, de comprender que esta función es esencial y que debe ejercerse en condiciones satisfactorias, ella camina boca abajo”. Qué viejo, qué lejos.

De él, La nieta del señor Linh (Salamandra), un libro triste. Muerte y memoria (y una rendija a la esperanza).

miércoles, 13 de octubre de 2010

Avenue Adolphe Buys


Fue ahí. Ahora es distinto, es un cruce bastante frecuentado, con un paso de cebra bien visible regulado por un semáforo. Vio venir el autobús y pensó, Si corro me da tiempo a comprar el periódico y no lo pierdo. Oyó silbar enérgicamente.

Monsieur!

La policía, rubia, uniformada, gritó y le reprendió con enfado,

Attendez au feu vert!

Asustado, aturdido, algo avergonzado, volvió sobre sus pasos. En la acera, una cuadrilla de rostros hieráticos aguardaban debidamente civilizados a que el semáforo cambiase de color.

(De haber estado, hubiera dicho, No te está mal)

martes, 12 de octubre de 2010

La escuela (I)

Salvado Novo por Manuel Rodríguez Lozano

A horas exactas
nos levantan, nos peinan, nos mandan a la escuela

Vienen los muchachos de todas partes,
gritan y se atropellan en el patio
y luego suena una campana
y desfilamos, callados, hacia los salones.
Cada dos tienen un lugar
y con lápices de todos tamaños
escribimos lo que nos dicta el profesor
o pasamos al pizarrón.

El profesor no me quiere;
ve con malos ojos mi ropa fina
y que tengo todos los libros.

No sabe que se los daría todos a los muchachos
por jugar como ellos, sin este
pudor extraño que me hace sentir tan inferior
cuando a la hora del recreo les huyo,
cuando corro, al salir de la escuela,
hacia mi casa, hacia mi madre.

Salvador Novo, Espejo, México, 1933

lunes, 11 de octubre de 2010

¡Qué despropósito!

Foto: REUTERS

Cada mañana El País, de papel. Hoy no hizo falta abrirlo. A Ángeles Espinosa la echan de Irán; a Liu Xiaobo lo mantienen en la cárcel y a Liu Xia (¿Lucía?), su compañera, la encierran en casa; en Belgrado unos 6000 energúmenos la lían al grito de “La cacería ha comenzado. Muerte a los maricones”. Se dijo, pasa página. Mejor no haberlo hecho, lo que estaba era la foto.

Lo cerró, pagó y se fue. Que les den por el culo (a los de Belgrado, les gusta, seguro).

domingo, 10 de octubre de 2010

J. M. Coetzee por Jean Rochefort


Es así, un escenario sobrio, una mesa, cuatro libros sobre ella, una lámpara y una silla, únicamente. Un hombre entra en el escenario y coge un libro, dice, Este libro me cambió la vida. El hombre, un bigote y una voz, es el actor Jean Rochefort, y el libro, Desgracia de J. M. Coetzee.  Comienza a leer.  

El universo de Coetzee empezó a multiplicarse y la voz, natural, magistral, de Rochefort les dejó clavados en la butaca, babeando. Fue el viernes, en el teatro de la Plaza Flagey, dentro del ciclo El Maratón de las palabras (y de los actores).


viernes, 8 de octubre de 2010

Censurado


Tenía menos de treinta años cuando el fotógrafo norteamericano Larry Clark publicó Tulsa. En principio, sólo un libro de fotografías dedicado a una ciudad, en seguida fue mucho más. Larry Clark no quiso mostrar la cara amable de la urbe de Oklanhoma en la que él había nacido, sino mirar sus espacios marginales, los de la prostitución, la droga.
Desde entonces la obra de este fotógrafo y cineasta estadounidense ha estado casi siempre rodeada de polémica. Ahora también, en París, se les acaba de prohibir a los menores de 18 años que vean una exposición de fotografías suyas. Las consideran excesivamente chocantes. Puede ser. En cualquier caso, habría que estar habituado, ya se sabe, el amor, el sexo, el placer genera en nuestra sociedad mucha más censura que todas esas asquerosas imágenes de cuerpos mutilados que aparecen casi diariamente en los telediarios, que todos esos rostros de bobalicones y perversos mandatarios, que la desproporcionada e innecesaria violencia de los viodeojuegos y los dibujos animados.

jueves, 7 de octubre de 2010

Terrakota (+ La Chiva Gantiva)


Tudo na misma panela, lo dicen ellos, y cuando se les escucha, así lo parece, reggae, gnawa, percusión, blues, un poco de todo y de todos los sitios, Portugal, África, India… En éste último disco parece que también guiños cubanos. Son de Lisboa, pero por lo que se viene viendo deben de ser como lo que hacen, de todas partes. Y este sábado están anunciados en Bruselas, a las 19h30, en la sala Beursschouwburg, vienen a presentar World Massala, su cuarto disco. El anticipo ya está allí.

miércoles, 6 de octubre de 2010

Calles (1)

© Koinsky on Flickr, 02/2007

Dicen que la rue des Chandeliers es una de las calles más antiguas de Bruselas, que está documentada ya en el siglo XIV. Dicen también que en ella vivían los fabricantes de velas, y de ahí su nombre. Puede ser. Casi diariamente se la deja al lado, hoy no.

martes, 5 de octubre de 2010

Luz (1)


Me habló de la luz. Lo sabía, la vas a echar de menos. Aún no, hoy sí. Él ya lo dijo, Claridad, no te apartes de mis ojos.

YO INVOCO

Claridad, no te apartes
De mis ojos, no humilles
La razón que me alienta
A proseguir. Escucha,
Detrás de mis palabras,
El grito de los hombres
Que no pueden hablar.
Por sus golpes, por toda
La lucha que sostienen
Contra el muro de sombra,
Yo te pido: persiste
En tu fulgor, ilumina
Mi vida, permanece
Conmigo, claridad.

INVOCATION
Clarté, ne quitte pas
Mes yeux, n'humilie pas
La raison qui me pousse
À continuer. Ecoute,
Au-delà de mes mots,
Le cri de tous ces hommes
Qui ne peuvent parler.
Au nom des coups, de toute
La lutte qu'ils opposent
À la muraille d'ombre,
Je t'en supplie: persiste
Et ton éclat, éclaire
Ma vie, reste avec moi
Toujours, clarté.

domingo, 3 de octubre de 2010

Quito


Foto: Alfonso Ortiz C.

Ha seguido llamando, dice que después de las noticias, del caos, de la policía, de las manifestaciones... Quito ha vuelto a la calma y se ha llenado de coches, de atascos, de bares con gente y de prisas y risas. Dice que la normalidad es tanta que parece increíble que antesdeayer fuese un país paralizado; dice también que la tranquilidad es tanta que parece sospechosa, que  escucha y no oye hablar del tema, sobre todo tiempo y fútbol; que anduvo paseando y que en Quito todas las calles están llenas, menos dos cuadras a la redonda del Palacio Presidencial que permanecen cerradas por precaución. Únicamente muchos militares en las esquinas, y algunos policías, vigilados. Uniformados vigilando a uniformados. Sospechoso(s).

sábado, 2 de octubre de 2010

A. V.

Dijo, Voy guardando las entradas de este blog, que empezó a publicarse en mayo de 2005, en un documento de Word que llamo "Bitácora". A día de hoy, ocupa un total de 553 páginas, 251.153 palabras.

Felicidades. Casi desde entonces, una referencia diaria, un traguito de agua fresca en el secarral de muchos días. Él solo, una referencia. Gracias.

viernes, 1 de octubre de 2010

Está en Quito

Foto El País
 
Dijo, ayer nos dimos un hermoso paseo por el casco antiguo. Es enorme, Antonio, y muy bonito. Iglesias, conventos, casas coloniales, cuestas, geranios. Puedes pasear y pasear y no sales del casco antiguo. Las plazas están adoquinadas y presididas por iglesias. Es bonito Quito. Después llegó Pedro con unos amigos, continuamos paseando, nos contaron historias de Bolivar y de Manuelita Sáenz, la Libertadora del Libertador, la revolucionaria, la atrevida, la precursora del feminismo latinoamericano, la que plantó al marido convenido y se echó a la lucha. También hablaron de la amistad de Manuelita con las negras Natán y Jonatás, de sus risas en Cataguango, y de su amiga Rosa Campuzano, la bella guayaquileña, la amante de San Martín. Historias de mujeres apasionantes y bravas. Terminamos cenando en  Hasta la vuelta señor. Fonda Quiteña. Maíz y chicharrones.

Luego dijo, No os preocupéis por las noticias sobre Ecuador. Yo estoy bien. Ya estoy en la residencia y no voy a salir de aquí. Esta mañana parecía una huelga de militares, pero hay rumores de golpe de estado.

Aquí, Golpe de Estado en Ecuador. La revuelta de los policías deja sin protección las calles de las principales ciudades y da vía libre a la delincuencia

Se nos poblaron de presagios los desvelos.