miércoles, 30 de junio de 2010

Daniel Mordzinski en el Instituto Francés



Al argentino Daniel Mordzinski le presentaron en París como “el fotógrafo de los escritores". Fue la pasada primavera con motivo de su exposición Les Trois Rives: una colección de 300 retratos de narradores, novelistas y poetas de Latinoamérica, de España y Francia. Aquella exposición que se presentó en París en la Maison de L'Amérique Latine está ahora, algo reducida, en el Instituto Francés de Madrid (Calle Marqués de la Ensenada, 10, metro Colón). Una excusa y un placer.

viernes, 25 de junio de 2010

Los amores difíciles de Adriana Lestido


En Casa de América de Madrid y hasta el 29 de agosto puede verse la exposición Amores difíciles de la fotógrafa argentina Adriana Lestido. La exposición, 159 fotografías que la autora realizó entre los años 1986 y 2007, se inscribe dentro de la programación de PHotoEspaña 2010. Ver para sentir.

jueves, 24 de junio de 2010

Un poema de José Corrales y una cena en el Zara


 
Foto Headlessmonk

Hay dos amigos que desde años, todos los años que pueden, se reúnen periódicamente para hablar y mantenerse. Antes era en un pueblo de playa y la cita semanal, ahora es en Madrid todos los meses. Ayer se encontraron en el Zara.

El Zara es un restaurante cubano (Calle Infantas, 5, junto a la Gran Vía) que les recomendaron. Les dijeron, Se come bien y no es caro.  Yuca con mojo, tostones (con plátanos verdes), tamales,  ropa vieja... Sí, puede ser.

También un poema de José Corrales.

Una mañana de abril

Se huele a café con leche
con tostadas,
mi madre en el patio está lavando
la ropa interior:
banderines anunciando en la mañana
que una vez más se ha ganado
la batalla de la luz y las sonrisas,
el patio lo agradece
lo agradecen los jazmines
la mata de papaya
y por supuesto también la jicotea
que en su tanque a carcajadas
les dice a los mosquitos
ranitas, gusarapos
que la mano de Dios
una vez más ha descendido,

Parece que se escucha
un brujón de lánguidos quejidos:
todo está listo
preparado
para esa hora del día
en que imposible
el cerebro se pone a razonar sobre la vida
la idea de la muerte no cuenta para nada;
los huesos, las pestañas
la carne toda inquieta
presintiendo el alivio
la certeza
de que van a cumplirse las promesas
que durante el sueño se han dejado listar
amontonarse,
la jicota se relame,
la ropa interior ya casi seca
emblanquece el patio ya radiante
son las diez y media, me levanto
y me asomo a la ventana:
Dios ha puesto de veras sus dos manos
su entera presencia
sobre Cuba.

José Corrales nació en Guanabacoa 1937 y murió en Nueva York, exiliado, en 2002. Fue sobre todo poeta pero también dramaturgo y actor. En España su poesía se presentó por primera vez con la antología 9 poetas cubanos que publicó en los años ochenta la desaparecida editorial Catoblepas.

martes, 22 de junio de 2010

Joaquín Calvo Flores en Abierto al aire


El otro día, por casualidad, un diccionario. En él, escondido u olvidado, un trozo de papel con cuatro versos.

Ten cuidado con la herida
que tan risueña me haces:
conozco estrellas fugaces
que duran toda la vida.

Lo pone, Cuchillo de Joaquín Calvo Flores; también la fuente, Abierto al aire.

Hoy,

a) ¿Qué fue de aquel poeta? ¿Por qué ese silencio?

b) Qué útil y necesaria aquella antología consultada de poetas extremeños que idearon Ángel Campos y Álvaro Valverde (y qué buena la foto, con los dos, sonriéndose, en la solapa)

(Ya sé que es lo de menos, pero el papel es de azul cuadriculado y la letra aún tardíamente adolescente)

lunes, 21 de junio de 2010

Somos Extremadura


De la noche a la mañana, las estaciones de metro de Madrid aparecieron hermoseadas con carteles que dicen Somos Extremadura. A lo mejor es un despilfarro, tal vez no hiciera falta, pero, sinceramente, uno agradece esta sonrisa bobalicona que se le planta en la cara cada mañana.

martes, 15 de junio de 2010

Suerte, Teresa

Bruselas. Foto Marhabanbikum

Y para que se te vaya poniendo cuerpo, este poema de Caroline Lamarche

Cuando marcho por la calle
no soy la más joven
ni la más bella
ni la mejor vestida
sino aquella que saluda
esa es la que soy

porque soy mujer y hombre y niño
ángel, demonio tal vez
y bestiario vivo
en el que se conocen las especies más extrañas

soy el árbol que mira a los transeúntes
la tierra que lo nutre
el cielo que lo penetra
hasta los nudos de la madera

y esta lengua que se quedó buen tiempo
entre los labios cerrados
antes de arriesgarse
en otras bocas

ante todo no soy de nadie
más que de ese danzarín que me precede y me sigue
y al cual yo digo “tú”
sin haber visto nunca su cara.

Quand je marche dans la rue

je ne suis pas la plus jeune
ni la plus belle
ni la mieux vêtue
mais celle que l’on salue
oui, mille fois, voilà celle que je suis

car je suis femme et homme et enfant,
ange, démon peut-être
et bestiaire vivant
où se côtoient les espèces les plus étranges

je suis l’arbre qui regarde les passants
la terre qui le nourrit
le ciel qui le pénètre
jusqu’aux nœuds du bois

et cette langue qui séjourna longtemps
entre deux lèvres closes
avant de se risquer
dans d’autres bouches

oui je suis tout cela
et bien d’autres choses
avant tout je ne suis à personne
qu’à ce danseur qui me précède et me suis
auquel je dis « tu »
sans avoir jamais vu son visage

(Traducción de José Luis Reina)

lunes, 14 de junio de 2010

Entrelíneas librebar


En Madrid hay muchos sitios que embelesan. Uno de esos lugares que sorprenden es el café literario Entrelíneas Librebar, en Gonzalo de Córdoba, 3, muy cerca de la calle Fuencarral. Es un espacio acogedor, de trato exquisito y música adecuada (ayer, con el volumen justo, sonaba, por ejemplo, The electrical morning de Marlango), donde se puede comer algo, beber un café o una cerveza, navegar vía WIFI, leer tranquilamente, comprar libros nuevos de editoriales independientes o clásicos de segunda mano, escribir, etc.

Además, Marta y Richard, dueños y encantadores, organizan exposiciones, presentaciones de libros, recitales, talleres, etc.

Y qué cosas, siempre que uno escucha la voz melodiosa de Leonor Watling es como si la presencia de Emilia Torrado anduviera cerca. Ayer también, y entonces, además, es el mismo placer multiplicado.

domingo, 13 de junio de 2010

Pablo Guerrero y Los cielos tan solos

En el Café Los Poetas. Foto Gorka Lejarcegi

El otro día en la Fnac de Callao se presentó Los cielos tan solos, el último poemario de Pablo Guerrero. Lo anunció en su blog Victor Alfaro y lo reseña en el El País Ricardo Cantalapiedra, quien dice de Pablo, Lleva 60 años en Madrid, pero cuando hablas con él da la impresión de que lo estás haciendo con Extremadura, con un rincón de África, con un viejo zorro del folk americano.
Por lo visto acompañaron al extremeño el cantautor Jabier Muguruza, el escritor Rodolfo Serrano, el pintor y filósofo Miguel Copón y el editor Fernando Guerrero. Qué bueno.

viernes, 11 de junio de 2010

Los condenados de Joaquín Benito de Lucas

 Foto: M.R.
En la Biblioteca Pública de Retiro, número 189 de la calle Doctor Esquerdo, todos los segundos jueves de cada mes se reúne la tertulia  Arco Poético. La dirige la escritora y ceramista Pepa Nieto y son fijos Soledad Cavero, Jesús de la Peña y Francisco de la Torre. Un mes conversan y otro escuchan. Ayer tocó escuchar. Fue al poeta Joaquín Benito de Lucas quien, de viva voz, hizo un extenso recorrido por su obra. 

También leyó Los condenados, uno de esos poemas que resumen una poética, que la contienen dosificada,  a saber, la memoria, la sencillez, el intimismo, los tiempos de la miseria y el dolor y los lugares de la infancia, el sufrimiento ajeno en carne propia, la indefensión, la mirada inocente …

Es un poema (Memorial del viento, 1978) que fue escrito en homenaje a Miguel Hernández y dedicado a Joaquín Álvarez Leal, y que viene precedido del texto El trabajo redime la pena, pero no redime el sufrimiento.

I
¿Eran culpables
o inocentes?
Las mañanas
nacían igual. Y ellos vivían a golpes
de azadón en los ojos
removiendo la tierra y su conciencia
en la prisión del odio
más pura.
Los que a otros
era final se abría a sus miradas
como una estrecha senda
donde el perdón crecía difícilmente entre laureles.
¿Cuántos? ¿Ciento? ¿Cincuenta?
No recuerdo
el número. A mis años
se ve antes la sonrisa
o el gesto: “Para ti, te lo has ganado”,
que el número en que entraban
a ponerse ante el muro
del mostrador por acortar sus vidas.

II

Bajaban de un pequeño
montículo del norte
de la ciudad. Igual cada mañana:
la sonrisa encendida
porque había amanecido para ellos
quizá la última vez.

No eran culpables a mis ojos
ni yo sabía qué era
ser culpable: ¿Llevar los uniformes
de un verde siena, botas desgastadas
o los ojos hundidos
por el dolor?
¿Ser puntuales a la cita
del vino aquel y el niño
cada mañana?

Bajaban de muy lejos,
de Extremadura y Murcia,
de Álava y Cataluña,
del Puerto de Santa María,
de la violencia y la traición.
Y cuando oía sus voces
resonar en el frío de diciembre
salía a recibirlos.
Y tras el mostrador de mi inocencia
esperaba impaciente
con los vasos ya puestos
y la mirada lista.
—    “Otra ronda, la pago yo”.
Y pagaba
con su vida, escarbando
en la tierra los años
que le quedaban todavía
para ganar la libertad.

jueves, 10 de junio de 2010

José Antonio Zambrano

Tal como hoy, hace ya algunos años, vio la luz una de las voces más consideradas de la literatura extremeña, y no sólo. Una buena ocasión para recordarlo, por ejemplo, con esta vitaliad de su primera época.

Así que la vida venga,
no la muerte,
a verme.

Noche adornada
del sueño,
a verme.

Lenta pasión
de sentirla,
a verme.

Así que la vida venga,
no la muerte,
a verme.

A verme.

Esto dice de él Jesús Bregante en su Diccionario Espasa de Literatura Española (2003):

Poeta. En su poesía hay un gusto por lo elemental, por una esencialidad que no está sólo en el uso del lenguaje, sino también en lo que se contempla y en cómo, lo que obliga a una lectura activa que impone un emotivo ejercicio de completud. Incluido en diferentes antologías, hay que destacar sus poemarios: Canciones y otros recuerdos (1980), El libro de las murmuraciones (1984), El rostro conocido (1987), La noche de los lirios (1989), Como una presunción (1994), Diario de los sitios (1995), La mitad del sueño (1999) y Después de la noche (2000).

miércoles, 9 de junio de 2010

Couto Viana

 Ilustración de Afonso Cruz
Ayer murió en la Casa do Artista de Lisboa Antonio Manuel Couto Viana. Había nacido en Viana do Castelo en 1923, y fue muchas cosas, pero sobre todo, poeta y teatrero. Se dio a conocer en los primeros años cincuenta cuando, junto con David Mourão-Ferreira, Luiz de Macedo y Alberto de Lacerda, sacó la revista de poesía Távola Redonda. Luego también dirigió la revista cultural Graal y colaboró en Tempo presente.

La crítica ha dicho que su obra es un intento de conciliar tradición y modernidad y que en ella confluyen varias tendencias: presencismo, surrealismo, existencialismo, etc., y una percepción un poco irónica y bastante lúdica de sí mismo.

Su primer libro fue O avestruz lírico (1948) y en él apareció este poema:

Genesis

No quiero nada:
Sólo dormir.
Cierra la ventana bien cerrada.
El sol puede surgir
Y ahuyentar a la noche sosegada.

Mas tú, que no y que no,
Que despertarme era preciso,
Y del peligro diste luego aviso
A la quietud en la que vivo yo.

Después, colgaste enfrente,
De la ventana abierta de par en par,
Esa bola de luz, amarilla, caliente…
— ¿Debo de protestar?

(La traducción es de Ángel Crespo.)

martes, 8 de junio de 2010

Ángel Alías

Ayer, en Robledillo de Trujillo, el mismo beso abrazado de la infancia, las horas de la siesta, su mula parda, la plazoleta con pozo y amistad. Antes de salir, le dije, Ángel, no se te olvide, a todos, a mi padre, que procuro como creo que querría, a tía Ana y a tía María, a Mercedes y a Margarita, mira que irse sin despedirme, a tía Filomena un dulce, y a tía Juana que no esté tan pendiente del genio de tío Antonio y su bastón, a Alfonso y a tío Sabino, a todos, enséñales la foto de aquella noche de verano con buñuelos y chocolate…

Luego, en el coche, el paisaje agostándose de mi tierra, algunas lágrimas, un hombre bueno.

Y el poema de Pavese

Vendrá la muerte y tendrá tus ojos
esta muerte que nos acompaña
desde el alba a la noche, insomne,
sorda, como un viejo remordimiento
o un absurdo defecto. Tus ojos
serán una palabra inútil,
un grito callado, un silencio.
Así los ves cada mañana
cuando sola te inclinas
ante el espejo. Oh, amada esperanza,
aquel día sabremos, también,
que eres la vida y eres la nada.
Para todos tiene la muerte una mirada.
Vendrá la muerte y tendrá tus ojos.
Será como dejar un vicio,
como ver en el espejo
asomar un rostro muerto,
como escuchar un labio ya cerrado.
Mudos, descenderemos al abismo.

sábado, 5 de junio de 2010

Un poema de Daniel Casado


Del Retiro, de la Feria, del polvo y de las colas, algunas bolsas de papel y este poema de Daniel Casado


LA SANGRE DEL ÁNGEL

No dejaba de escribir.
Sangraba aún cuando llegamos.

Inútil fue toda palabra. El aire
opaco de la tierra, su lenta
putrefacción, debieron confundirlo.

Ahora es su cuerpo la lluvia.

Y una orquídea de sangre canta,
seminal, en la ventana.

El poema es de Oscuro pez del fondo, accésit del Premio Adonais de este año, y va precedido de una referencia a Al Berto a modo de cita, Talvez seja tempo de começares a morrer

Y hubo quien sintió añoranza y la amistad.

viernes, 4 de junio de 2010

Bibliobollywood

Para los que crecieron en provincias, para los que se resistieron a vivir en grandes ciudades, hacerlo  en Madrid (por las razones que sea, también por haber claudicado de lo que se dijo) es un coste de oportunidad diario. Este fin de semana, por ejemplo, Feria del Libro con pic-nic en el Retiro (y conversación con Juan Carlos, lo que multiplica el placer) y además el Festival BollyMadrid 2010.

Si se puede, quizá no sea una mala ocasión para darse un paseo por el barrio de Lavapiés, un viajecito (con su buena dosis de tipismo) por las tradiciones y costumbres de la India sin salir de la ciudad. Es el tercer año, y se anuncia, como en los anteriores, el mercadillo de artesanía en la plaza de la Corrala, la degustación gastronómica de los platos típicos (a euro la tapita), las proyecciones de cine al aire libre en la plaza Agustín Lara, las actuaciones musicales en la calle (verbena a ritmo de Bollywood), talleres de danza y cuentacuentos para niños, etc., etc.

Si se espera a que pase o apetece otro día cualquiera, una buena opción para gustos como estos puede ser una cenita en el Raja Mahal, un indiopakistaní baratito y apreciable cerca de Antón Martín (calle Ave María 15). De lo mejor, el pollo tiki-masla y el arroz basmati.


miércoles, 2 de junio de 2010

Adela Núñez en la Casa de Cantabria


En el número 10 de la calle Pío Baroja de Madrid, casi haciendo esquina con Menéndez Pelayo y muy cerca del parque del Retiro, se encuentra la Casa de Cantabria. Es un edificio de estilo montañés del arquitecto Carlos de Riaño. Además de las actividades propias del folclorismo un poco rancio de este tipo de hogares, en la Casa de Cantabria también se organizan conciertos, conferencias, presentaciones de libros, etc. Ayer, por ejemplo, el grupo Matises inauguró una exposición de pintura al óleo organizada por la pintora Ana Muñoz. Entre lo expuesto, cuatro obras de Adela Núñez.
Luego un viaje en metro y una cervecita fría en la terraza del Café de Oriente con Zara, Emilio y los ojos negros de una silueta delgada, vestida de gasa, corresponsal de Le Figaro.